martes, 17 de junio de 2008

Momento agridulce

El dia viene un poco cargado de sensaciones, he esperado unos dias para asimilar lo sucedido en los ultimos dias.
Durante estos ultimos cuatro años, soñaba con que en algun momento, la chica a la que quiero volvía a mi lado, y sin embargo, me encuentro con todo lo contrario.
La sinceridad que ha tenido conmigo, no hace sino reafirmarme en porque sigo enamorado de ella, porque hace falta tener fuerza para decirle a tu anterior pareja que se ha vuelto a enamorar de alguien, que por supuesto, no eres tú.
Por un lado, sientes una terrible pena, ya que siempre piensas en que al final, como en las peliculas, te llegará tu oportunidad, como a Ross y Rachel en "Friends", o en "Love Actually".
Pero de momento, ni yo soy Ross, ni esto es una pelicula.
Es cuando te das cuenta de que ya estas fuera de juego y aunque tengas su compañía, ya no serás realmente parte de su vida, ni ella dela tuya.
Pero por otro lado, te queda la ilusión de que haya encontrado a alguien que por fin consiga hacerla feliz como ella se merece, que le dé ese cariño constante, ese apoyo y que se sienta querida, la verdad es que su vida no ha sido fácil y me siento orgulloso de ver como ha conseguido siempre sobreponerse a las adversidades (que no han sido pocas).
La conversacion fue especial, y por primera vez en tiempo, volvi a sentir su cariño, con un abrazo de varios minutos, que hacia que me temblaran las piernas y tuviera unas ganas de llorar horrorosas, pero no se lo merecía, la honestidad de explicarme su situación bien valía que al menos en esta ocasión fuera capaz de comportarme lo mejor posible.
Supongo que ahora todo cambiará, es lo lógico, porque sería muy dificil para todos esa amistad que hemos tenido hasta ahora. Su nueva pareja porque no lo entendería, o al menos, le costaría bastante, a Ana porque se sentiría incomoda y a mi, porque... la sigo queriendo, y aunque sea capaz de aguantar el tipo lo mejor posible, sé que no debo estar muy cerca porque no quiero que le vaya mal, sino todo lo contrario, espero que le dé todo lo que necesite para ser feliz y no se equivoque como lo hice yo. Por supuesto, tambien espero que ella haya aprendido como dos personas queriendose tanto fueron incapaces de llevar una relacion y le pueda servir para su futuro.
De todas formas, curiosidades de la vida, empecé a escribir este blog en febrero como valvula de escape tras varias noches sin dormir, estoy seguro que de alguna manera, mi mente sabia que Ana se me estaba escapando definitivamente. No es que crea en estas chorradas, pero tiene su punto oscuro que coincida en el tiempo todo esto.
A ver si llega de una vez el momento de escapar de todo esto y empiezo de cero en otro lugar, porque todo lo que me ha dado esta ciudad, me lo ha ido arrebatando poco a poco.

sábado, 12 de abril de 2008

Gracias, fue tan bonito...

La vuelta a la primavera, es una mezcla de sensaciones. Por un lado el buen tiempo invita a disfrutar mas los momentos de relax, pero por otro lado, la mente revive momentos pasados. Y esos recuerdos hacen herida.

En dos meses, la vida de una persona cambia irremediablemente. En mi caso, por motivos de trabajo, quizá tenga que cambiar de ciudad, es para mejorar, y eso es bueno porque será la forma de desaparecer de una ciudad que me dió la espalda y me arrancó de la persona que mas he querido en mi vida.

Supongo que una vez que se rompe la magia, cada uno de nosotros piensa en como hubiera podido ser la vida junto a la persona a la que quieres y ya no podrás volver a querer. Sueñas con avanzar, con hacer todas esas cosas que cuando eres adolescente crees imposibles y que las deseas a medida que avanzan los años.

En mi caso, ya hace casi 4 años que no puedo vivir queriendo y hay situaciones de dolor, que seguirán siempre apareciendo.

Hace unos dias estuve en el concierto de un grupo que nos gustaba mucho a los dos, El Canto del Loco, la ultima vez que estuvimos en su concierto juntos, sentia su peso sobre mis hombros mientras coreabamos las canciones. Mientras sonaban las canciones esta semana, queria cerrar los ojos y poder volver a sentir el peso de su cuerpo en mi, y volver a cantar juntos esas canciones, que en su dia nos gustaban y con las que ahora ademas te identificas por el contenido de las letras. Ojala hubiera estado ella conmigo.

Pasan los años y no dejo de culparme por no haber sido capaz de mantener viva esa llama que se apagó en diciembre del 2004.

No fui mas que un crio con miedo, con miedo a querer y que te quieran. No habrá mujer en el mundo capaz de hacerme sentir lo mismo.

Pagaría por poder volver al pasado, y no hacer las estupideces que llevaron al desastre.

Tantas cosas en comun, y todas tiradas en un baul sin llave al fondo del mar.

Quiero volver a sentirla, y no puedo. Sé feliz Ana, al menos que uno de los dos, lo consiga.

Ayer te esperé y no viniste.

Era de noche y yo estaba en la puerta del hospital esperando como tantas veces a la salida de tu jornada laboral, la calle ya no parece la misma, o al menos no se ve de la misma forma.

Y es que no es lo mismo, esperar que tu dia se tiña de color e ilusión al verte, que esperar solo en la calle sabiendo que ya no estarás ahi.

Ojalá tengas a la persona que quieres ahi, esperandote como yo.

Hay espinas que quedan tan metidas, que no se pueden sacar. Pero esos años nadie me los podrá quitar, los tendré solo para mi. Serán eternos, los reviviré siempre que pueda.

Te quiero, mi vida

martes, 19 de febrero de 2008

Lluvia de invierno

La noche no invita a la alegria, ha llegado tras un dia oscuro de nubes contanstes y lluvia intermitente.
Hoy hubiera sido un día de esos en los que te apetecería estar en el regazo de tu pareja en casa, contando esos pequeños detalles que ha tenido la jornada. Supongo que eso será un handicap para dormir esta noche y no pensar mas de la cuenta.
La lluvia de hoy me ha traido a la mente los dias que pasamos juntos en un sitio precioso en la costa gallega, las Islas Cíes. Allí la sensación del paso de tiempo es extraña, las horas pasan y no tienes noción de la rapidez.
De todo aquello,hay un sitio especialmente significativo y que me trae muy buenos recuerdos, el faro grande.
Llegar hasta ese punto lleva poco mas de una hora de paseo, y digo de paseo porque el entorno y la compañia era tan entrañable, que no merece la pena acelerar el paso. Tras el paso por la zona de bosque frondosa, cuando alzas la vista, se vislumbra la ascensión haciendo un zig zag hasta el cielo, y, a medida que vas avanzando, las gaviotas se hacen a los lados como si de los guardianes del faro se trataran.
Una vez llegado a lo mas alto, el paisaje es estremecedor, mirando al horizonte, la imaginación vuela tan alto o incluso mas que las gaviotas y piensas en lo lejos que está la tierra firme mirando al oeste, y es que América, esta realmente lejos y te sientes realmente pequeño e insignificante en la inmensidad del oceano, pensando en lo que debieron vivir generaciones pasadas buscando una vida mejor.
En ese momento, ambos pensabamos que en algun momento de nuestras vidas, cruzariamos el mar y añadiriamos una nueva experiencia en aquel continente juntos, pero la vida da muchas vueltas y ahora me encuentro con esa futura experiencia en la agenda sabiendo que jamás la podré compartir con ella.

lunes, 18 de febrero de 2008

Soñando despierto

Este blog que empiezo hoy, es fruto de los momentos de insomnio y de los momentos del dia donde uno sueña despierto.
Las noches van pasando y cuando uno se esconde en la soledad de su cama, es cuando le vienen las ideas a la cabeza con mayor claridad. En mi caso, no es con mas claridad, sino con mas persistencia. De ahi la necesidad de contar una de esas pequeñas historias que tiene la vida, ya que es imposible seguir acumulando sentimientos y no compartirlos con nadie.
La mujer a la que amé, a la que amo y a la que siempre amaré, hace muchos años que ya no está a mi lado. Uno piensa que el tiempo lo cura todo, y no niego que en gran parte eso es cierto. Seguro que muchas de las personas que forman el dia a dia de esta sociedad lo han vivido, pero también tengo claro que cuando del corazón se trata, las cosas son muy diferentes, y ese es mi caso.
Tuve la gran suerte de conocer a la mujer de mi vida, cuando todavía eramos adolescentes en el instituto, y desde entonces, he vivido muchos de los momentos mas felices de mi vida junto a ella. Han pasado ya mas de una decena de años y muchos, lo he pasado a su lado, aunque ahora solo sea compartiendo amistad. Es cierto que en cierto modo, me encuentro en una situación privilegiada, porque la mayoria de las personas tras una relación fallida, se deshacen de todos los recuerdos compartidos y apenas vuelven a saber nada de esa gente con la que pasaron algún periodo de su vida. En ese aspecto, me siento afortunado de poder seguir viendo la persona que quieres y pasar buenos momentos.
Pero, por otro lado, se te desgarra el alma de volver a ver los ojos de esa persona y no tener ese brillo de deseo que un dia tuvieron y las lagrimas hacen fuerza por aparecer cuando ves que los labios que te decian "Te quiero" y que te besaban, ya no hacen mencion alguna de volver a aquellos años pasados.
Cada vez que la veo, pienso en todo lo que compartimos y en lo que podriamos volver a compartir si fuera lo suficientemente valiente en decirle todo lo que siento. Pero siempre me invade el mismo miedo, ¿y si pierdo lo que tengo de ella? ¿Cómo sé que si le digo que la quiero me seguirá permitiendo estar junto a ella sin sentirse incomoda?

Al mismo tiempo, quiero pensar y sueño despierto pensando en que tras esa conversacion demorada eternamente, ella me sonrie, llora de alegria y nos fundimos en un beso, como aquellos que le daba en los dias de tormenta bajo la lluvia o con la Torre Eiffel como imagen de fondo.